Las causas de los mareos son extremadamente diversas, ya que estos se relacionan a menudo con fatiga o ansiedad, pero también son producidos por problemas en el oído interno, alergias, hipo o hipertensión arterial, calmantes y somníferos, desequilibrios de azúcares o incluso por un dolor muy intenso.
Por esto, es imposible contar con remedio que ponga fin a todos los mareos. Pero sí existen algunas soluciones naturales que pueden ayudarnos a prevenirlo o mejorar aquellos menos graves.
Para empezar, los vahídos provocados por la extenuación o la ansiedad remiten espontáneamente tras un tiempo de reposo.
Las infusiones de anís son recomendadas para mejorar los mareos suaves. Así como beber abundante agua, especialmente si se ha hecho algún notable esfuerzo físico previamente a que la sensación de mareo comenzase.
Sentarse e inclinarse hacia delante con la cabeza entre las rodillas contribuye a activar el riego sanguíneo hacia el cerebro, lo que disminuye la sensación de vértigo y el aturdimiento. Además, se deben evitar los cambios bruscos de posición, sobre todo al pasar de estar tumbados a sentarnos.
Otro gran remedio contra los pequeños mareos es la manzana, y más concretamente su zumo. Para que funcione, se deben consumir 100 mililitros (aproximadamente un vaso) del mismo y a continuación acostarse. Si los mareos persisten se continúa bebiendo zumo varias veces al día, hasta que desaparezca por completo la sensación malestar.
Fuentes:
http://www.remediospopulares.com/mareos.html
http://mundoasistencial.com/remedios-caseros-para-los-mareos/
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